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| French negro al final del camino en espera. |
La construcción de nuevas
instalaciones destinadas a mercados, al parecer en algunos puestos del Ecuador,
se ha convertido en una constante, seguramente para que los nombres de los
ejecutores conste en alguna placa marmórea, que se empolve hasta que alguien
misericordioso la retire; para quienes son de lengua perversa y
pertinaz, el hecho no respondería ni a la necesidad objetiva ni a la crecida vanidad, sino más bien a un
jugoso negocio entre administradores (elegidos en los comicios pertinentes), contratistas, desbancadores… y los negociantes del rededor del
predio.
instalaciones destinadas a mercados, al parecer en algunos puestos del Ecuador,
se ha convertido en una constante, seguramente para que los nombres de los
ejecutores conste en alguna placa marmórea, que se empolve hasta que alguien
misericordioso la retire; para quienes son de lengua perversa y
pertinaz, el hecho no respondería ni a la necesidad objetiva ni a la crecida vanidad, sino más bien a un
jugoso negocio entre administradores (elegidos en los comicios pertinentes), contratistas, desbancadores… y los negociantes del rededor del
predio.
Machachi, la cabecera del
cantón Mejía, no es la excepción de la constante arriba mencionada, desde
hace meses de echó por tierra el antiguo mercado, que en administraciones
municipales pasadas fue convertido en una especie jaulas amontonadas y fétidas porque se les negó
la luz y el recorrido del aire; así, algún “experto” lo arruinó, sin ningún
miramiento a la historia o al diseño primigenio; aquella construcción fue arrancada
desde sus cimientos; el enorme hueco, que surgió, se rellenó con
hormigones que pretenden ofrecer un edificio para que las señoras y los señores
hagan las compras con sus canastos entre los brazos, mientras recorren los puestos de carnes,
verduras, frutas, tubérculos, motes, puercos hornados, librillos con papas, pedazos pecados fritos sobre arroz seco…. vestidos, calzados… plásticos y hierbitas; todo,
obviamente, distribuido en diversos pisos cuyo acceso se tendrá desde los garajes
subterráneos y desde las entradas directas de las cuatro calles que forman la
manzana, mediante escaleras y ascensores. ¿Pondrán una sala de cine en la
azotea? supongo ¿tal vez se pueda contemplar el cielo estrellado mediante un telescopio
o al menos ver los nueve volcanes con largavistas (poniendo unas moneditas en uno de
esos aparatos, que recuerdan a Galileo Galilei)? ¡Sería bueno, también, observar al gran
Chalupas mediante hologramas!
cantón Mejía, no es la excepción de la constante arriba mencionada, desde
hace meses de echó por tierra el antiguo mercado, que en administraciones
municipales pasadas fue convertido en una especie jaulas amontonadas y fétidas porque se les negó
la luz y el recorrido del aire; así, algún “experto” lo arruinó, sin ningún
miramiento a la historia o al diseño primigenio; aquella construcción fue arrancada
desde sus cimientos; el enorme hueco, que surgió, se rellenó con
hormigones que pretenden ofrecer un edificio para que las señoras y los señores
hagan las compras con sus canastos entre los brazos, mientras recorren los puestos de carnes,
verduras, frutas, tubérculos, motes, puercos hornados, librillos con papas, pedazos pecados fritos sobre arroz seco…. vestidos, calzados… plásticos y hierbitas; todo,
obviamente, distribuido en diversos pisos cuyo acceso se tendrá desde los garajes
subterráneos y desde las entradas directas de las cuatro calles que forman la
manzana, mediante escaleras y ascensores. ¿Pondrán una sala de cine en la
azotea? supongo ¿tal vez se pueda contemplar el cielo estrellado mediante un telescopio
o al menos ver los nueve volcanes con largavistas (poniendo unas moneditas en uno de
esos aparatos, que recuerdan a Galileo Galilei)? ¡Sería bueno, también, observar al gran
Chalupas mediante hologramas!
El fracaso de algunos intentos
de hacer mercados de ese estilo, sin duda pondrá, a los mentores,
ejecutores y demás fautores del nuevo mercado de Machachi, algo de sentido
sobrenatural para que el experimento a ellos sí les funcione. Por otra parte, Machachi no solo requiere de
un mercado sino de varios mercados y lo mejor es que todo está por hacer, pero ¿Quienes deberán hacerlo? ¿Tendrán las ideas necesarias para
hacer algo digno y útil?
de hacer mercados de ese estilo, sin duda pondrá, a los mentores,
ejecutores y demás fautores del nuevo mercado de Machachi, algo de sentido
sobrenatural para que el experimento a ellos sí les funcione. Por otra parte, Machachi no solo requiere de
un mercado sino de varios mercados y lo mejor es que todo está por hacer, pero ¿Quienes deberán hacerlo? ¿Tendrán las ideas necesarias para
hacer algo digno y útil?