Cerradura campecina. Alpe Devero, 2014

 ¿Qué cosa vemos en estas momentos de
protestas y contra protesta en la política nacional? ¿Borregos de colores
diversos o borregos con camisetas diversas?

Lo ridículo es que hasta ahora el talentoso
Rafael Correa sirve ha algunos patrones (patrones, que por lo que se ve, no son
tan listos pues le han hecho perder votantes y puestos de poder). Patrones que
seguramente están conectados con los negocios que han tenido éxito en estos
tiempos de revolución ¿Cuáles negocios? El gran público no lo sabe y solo podemos
hacer suposiciones: empresas constructoras, empresas de materiales de
construcción, comercializadoras de vehículos… empresas de relaciones públicas…
ministerios inútiles (como el de cultura –como está dirigido- o peor aún ese
del “buen vivir”) lo que no me agrada es ese negocio del “eternit”; que hace
sospechosa la razón de los impuestos a la comida chatarra (para mi una buena
idea) pero, si es por la salud, los efectos del eternit son más que sobrados
¿por qué no lo prohíben?

En el otro bando, las otra ovejitas de color
diverso ¿qué pensaran ganar? La vieja política de los patroncitos manejaba el
país solo para provecho propio y explotar lo que podían, aplastando y
humillando a los más pobres y desafortunados.

Habría que recordar a todos, una vieja
canción de Mägo de Oz (Molinos de viento)
“si acaso tu no ves mas allá de tu nariz… no todo es blanco, negro es gris todo
depende del matiz, busca y aprende a distinguir…”.