Recorte de periódico, Madrid, 2013
Comenta un
amigo a propósito de la corridas de toros: “En los ochentas, fui a una corrida
de toros, en la plaza de Quito. Quería
entender el ‘arte taurino’. Pero, más de uno de esos toreros (‘artistas’)
fallaba reiterativamente en la estocada. El público ‘entendido’, por su parte,
gritaba ¡Asesino!¡Carnicero! Este hecho nunca entendí. Toda el proceso de la
corrida de toros es asesinar al toro y exaltar el morbo de la gente.
¡Horroroso! No se debe llamar ‘toro de lidia’ sino ‘toro de martirio’, pues el
animal es torturado y no solo en las corridas de toros sino en los encierros
(como el de san Fermín). Para colmo, las celebración de este horroroso
sacrificio de toros tiene nombres religiosos (Jesús del Gran Poder) tergiversando
el sentido de la fe. En realidad es solo el mercantilismo que se aprovecha del
morbo de la gente para ganar dinero”.
amigo a propósito de la corridas de toros: “En los ochentas, fui a una corrida
de toros, en la plaza de Quito. Quería
entender el ‘arte taurino’. Pero, más de uno de esos toreros (‘artistas’)
fallaba reiterativamente en la estocada. El público ‘entendido’, por su parte,
gritaba ¡Asesino!¡Carnicero! Este hecho nunca entendí. Toda el proceso de la
corrida de toros es asesinar al toro y exaltar el morbo de la gente.
¡Horroroso! No se debe llamar ‘toro de lidia’ sino ‘toro de martirio’, pues el
animal es torturado y no solo en las corridas de toros sino en los encierros
(como el de san Fermín). Para colmo, las celebración de este horroroso
sacrificio de toros tiene nombres religiosos (Jesús del Gran Poder) tergiversando
el sentido de la fe. En realidad es solo el mercantilismo que se aprovecha del
morbo de la gente para ganar dinero”.
Son muchas
temáticas, las que sugiere el amigo; cada una necesitaría un tratamiento
particular. Me focalizaré solo en un aspecto de la tauromaquia. Es justo partir
de la experiencia, y todos los elementos que brinda esa experiencia deberían
interpretarse en su marco lógico. Por
ejemplo, ir a participar de una corrida de toros no es ir a ver como matan al
toro o el combate entre el toro y el torero. Así como, es imperdonable que un
matavaca piense que es torero, porque se viste de luces. Pero eso sucede en
casi todos los ámbitos de la vida, no solo en los artes, siempre hay gente que
hace cosas solo porque se viste en un modo y está en un cargo, aunque, se debe
también considerar, que no todos los días son buenos.
temáticas, las que sugiere el amigo; cada una necesitaría un tratamiento
particular. Me focalizaré solo en un aspecto de la tauromaquia. Es justo partir
de la experiencia, y todos los elementos que brinda esa experiencia deberían
interpretarse en su marco lógico. Por
ejemplo, ir a participar de una corrida de toros no es ir a ver como matan al
toro o el combate entre el toro y el torero. Así como, es imperdonable que un
matavaca piense que es torero, porque se viste de luces. Pero eso sucede en
casi todos los ámbitos de la vida, no solo en los artes, siempre hay gente que
hace cosas solo porque se viste en un modo y está en un cargo, aunque, se debe
también considerar, que no todos los días son buenos.
La pregunta
que debió responderse, antes de ir a la plaza, es ¿Qué cosa es la tauromaquia?
Si desgraciadamente –como en mi caso- nadie le enseñó. La respuesta solo se intuye
participando en un verdadera corrida de toros. El final (obvio) en la mejor
corrida es el indulto del toro, este sería un trabajo bien hecho. El indulto no
es alcanzado por la chilimbiquería de algunos, sino porque el torero ha sido
capaz de entender y sacar a relucir la nobleza del animal y el público ha sido
capaz de justipreciarlo.
que debió responderse, antes de ir a la plaza, es ¿Qué cosa es la tauromaquia?
Si desgraciadamente –como en mi caso- nadie le enseñó. La respuesta solo se intuye
participando en un verdadera corrida de toros. El final (obvio) en la mejor
corrida es el indulto del toro, este sería un trabajo bien hecho. El indulto no
es alcanzado por la chilimbiquería de algunos, sino porque el torero ha sido
capaz de entender y sacar a relucir la nobleza del animal y el público ha sido
capaz de justipreciarlo.
J. Lennon
-dicen- era capaz de hacer una canción magnifica con cualquier cosa. Pero,
ciertamente, hay pocos Lennon o mejor dicho, todos deberíamos esforzarnos por
ser como Lennon. Pero, la mayoría nos acomodamos en no hacer nada o hacer lo
que se puede (una mala y mediocre faena).
Es bueno, que alguien recuerde esto. Es decir, que siempre hay sujetos
estúpidos que echan a perder cosas geniales ¿por qué? por miedo, por
vanagloria, por dinero, por ignorancia, por mala suerte, por los obstáculos,
por las enemistades… Lograr, mostrar esto es el fin de cualquier arte.
-dicen- era capaz de hacer una canción magnifica con cualquier cosa. Pero,
ciertamente, hay pocos Lennon o mejor dicho, todos deberíamos esforzarnos por
ser como Lennon. Pero, la mayoría nos acomodamos en no hacer nada o hacer lo
que se puede (una mala y mediocre faena).
Es bueno, que alguien recuerde esto. Es decir, que siempre hay sujetos
estúpidos que echan a perder cosas geniales ¿por qué? por miedo, por
vanagloria, por dinero, por ignorancia, por mala suerte, por los obstáculos,
por las enemistades… Lograr, mostrar esto es el fin de cualquier arte.
La tauromaquia
es quizá el único arte donde no se puede mentir… O se entré en juego
verdaderamente, como dice José Tomás (quizá el único torero de los últimos
tiempos), o se acepta el riesgo (de muerte) o no hay arte. Cuando, se participa
de una corrida de toros se distingue lo auténtico de lo fingido y mediocre. Y
se puede aprender las consecuencias horrorosas de una masa ignorante o peor
aún, los efectos de esos que van a ver morir el toro… también, se puede ser
testigo del pobre desempeño de un torero que tiene una mala racha.
es quizá el único arte donde no se puede mentir… O se entré en juego
verdaderamente, como dice José Tomás (quizá el único torero de los últimos
tiempos), o se acepta el riesgo (de muerte) o no hay arte. Cuando, se participa
de una corrida de toros se distingue lo auténtico de lo fingido y mediocre. Y
se puede aprender las consecuencias horrorosas de una masa ignorante o peor
aún, los efectos de esos que van a ver morir el toro… también, se puede ser
testigo del pobre desempeño de un torero que tiene una mala racha.
Yo voy a la
plaza y espero ver algo de ese arte que a veces solo se insinúa, como en todas
las otras manifestaciones artísticas auténticas. No he visto nunca una gran
faena, como no he visto nunca a un gran artista en otros campos. Pero, sé que
el arte existe igual que existen los artistas… así como sé, que lo mejor de cada faena,
recuerda la responsabilidad que tengo y espero no ser un horroroso matavaca que
acuchilla y maltrata no solo a un animal sino a las personas, por medio de la
palabra y la conducta. Además, me enseña que debo prepárame, ser respetuoso y
saber que la vida no es un juego infantil, que en ella está el dolor, la
muerte, el cansancio y, que tarde o temprano, es el toro el que pondrá fin a mi
aventura de sol y de arena.
plaza y espero ver algo de ese arte que a veces solo se insinúa, como en todas
las otras manifestaciones artísticas auténticas. No he visto nunca una gran
faena, como no he visto nunca a un gran artista en otros campos. Pero, sé que
el arte existe igual que existen los artistas… así como sé, que lo mejor de cada faena,
recuerda la responsabilidad que tengo y espero no ser un horroroso matavaca que
acuchilla y maltrata no solo a un animal sino a las personas, por medio de la
palabra y la conducta. Además, me enseña que debo prepárame, ser respetuoso y
saber que la vida no es un juego infantil, que en ella está el dolor, la
muerte, el cansancio y, que tarde o temprano, es el toro el que pondrá fin a mi
aventura de sol y de arena.